Una pieza que combina la fuerza del ónix con la sofisticación de las zirconias, en un cuerpo de plata 925 y detalles en oro 10K.

Centrándose en la mesa superior del anillo, se encuentra un Ónix de tamaño imponente, una piedra tan intrigante como poderosa. Su engarce, diseñado con meticulosa precisión, es de oro 10K, una muestra de lujo y distinción. Esta piedra negra es conocida por sus propiedades de protección, fortaleza y poder personal, y ha sido apreciada a lo largo de la historia como un talismán de coraje y éxito.

En cada borde lateral del Ónix, cinco zirconias están engarzadas en línea, proporcionando un resplandor delicado y equilibrado. Estas gemas, un emblema de pureza y concentración, complementan el Ónix y contribuyen a una presentación visual que cautiva y atrae.

Finalmente, en ambos lados del anillo se exhiben relieves de coronas de rey en oro 10K. Este elemento majestuoso representa la autoridad, la victoria y el honor, y al igual que la corona real, este anillo no solo destaca por su belleza, sino por lo que simboliza: la elevación y el poder.

Este anillo sello es una celebración de la masculinidad auténtica, la elegancia madura y el lujo discreto. Una pieza que te invita a sentirte empoderado, especial y conectado con un legado de distinción y exclusividad.